Las reglas vibratorias son maquinas especializadas en el acabado de superficies de hormigón y asfalto. La vibración de alta frecuencia con la que cuentan estas máquinas dispersa, enrasa y nivela el hormigón, por lo que se utilizan para conseguir un acabado superficial. Son adecuados tanto para carreteras como para maniobrar en espacios reducidos.
Esta maquinaria está compuesta, principalmente, por una paleta o viga que generalmente es de acero o aluminio, que está sujeta con un perfil al moto o unidad vibratoria. La paleta o viga que se adjunta a la unidad vibratoria permite que se la vibración se ejerza de forma adecuada al hormigón.
Gracias a su diseño ligero, las reglas son fáciles de transportar y permiten que un solo operador pueda manejarlas de forma rápida y sencilla. Además, cuentan con mangos totalmente ajustables para ofrecer una máxima comodidad al operador así como facilitar su control.
Las reglas cumplen una triple función: distribuyen el hormigón, lo enrasan y compactan, eliminando burbujas de aire y dejando un acabado de material fino o rústico, según las necesidades de la obra a tratar. El diseño de la hoja de las reglas vibratorias permite cortar y alisar en una sola operación. La vibración del mango se minimiza gracias a un eficiente montaje de la maquinaria encargado de absorber los impactos.
Dependiendo del modelo de regla que se precise, esta maquinaria puede abarcar un rango de trabajo que va desde los 120 cm hasta los 5 metros. Hay que tener en cuenta que, como ya hemos explicado en otras ocasiones en este blog, un hormigón bien compactado tiene una mayor impermeabilidad y resistencia a los ataques de agentes externos. En casi cualquier trabajo que se vaya a realizar con hormigón debe nivelarse posteriormente para crear una superficie uniforme. Ahí es donde entran las reglas vibratorias.
En nuestra web puedes consultar los diferentes tipos de reglas que ofrecemos.